Carambola Zine es una publicación digital que reúne textos y trazos de mujeres alrededor de un solo tema, el cual se va ramificando en las múltiples miradas de las artistas que participan de sus páginas. El primer número se lanzó en abril de este año, ya en estado de emergencia nacional debido a la Covid 19. La creación de los contenidos giró en torno al tema ‘El Verano’, a manera de despedida de la última estación que gozamos en algo antes conocido como ‘libertad’.
Llegué a él meses atrás, poco antes de empezar a trabajar en Machucabotones, cuando recién planeábamos las secciones para esta web. Estuve postergando este artículo porque es difícil escribir sobre aquello que sientes que habla por sí solo. ¿Qué queda por decir? Para descubrirlo he regresado a sus páginas. Pienso en cuán importante es el ejercicio de crear de manera colectiva, de compartir un sueño que se manifieste en algo hermoso y accesible, de reunir tantas perspectivas y comprender que un suceso de tal magnitud tiene efectos muy diversos para una misma sociedad. Carambola Zine es, en ese sentido, memoria histórica y artística que sirve en el proceso de asimilar la nueva realidad modelada por la pandemia.
Justamente es la pandemia el disparador del segundo número, el cual tiene como punto de partida las sensaciones de la cuarentena. ¿Cuántas personas seguirán en total encierro hoy en día? Leer el segundo número me hizo pensar en mi mamá, en las madres y padres de las personas de mi generación, en cómo viven ellos el miedo y la resistencia que le ponen al cambio. Leo la historieta de Daniela Zamalloa y pienso ‘no estoy sola, alguien me acompaña en esto que estoy sintiendo’. Supongo que de eso se trata. Lo mismo me pasó al leer el texto ‘La Carta’ de Ana Estrada, escritora y activista por la muerte digna.
“Ha sido un proceso distinto para cada una de las ediciones. Para la primera trabajé sola en la búsqueda de artistas, convoqué a personas cuyo trabajo admiro y a las que conozco; pero también, me animé a escribir a otras artistas que sigo sin conocer personalmente. Fue un cincuenta – cincuenta.” Me cuenta Andrea Balbuena, creadora del zine. Para el segundo número de Carambola se sumó como coeditora María Alejandra López, periodista y poeta que también comparte sus textos en ambos números.
Algo que amé del fanzine es que tiene una estética particular que une lo escrito y lo gráfico de manera ordenada y natural, hay equilibrio e invita a una lectura de principio a fin, sin saltarse nada. “El tema de la fluidez en la lectura fue algo más pensado — me comenta Andrea — en el sentido que se creó un orden que tenía que ver con distintas etapas de un mismo proceso, de una experiencia compartida: enterarse de los hechos, reflexionarlos, interiorizarlos, para luego llegar a un despertar de emociones varias y finalmente lograr a una sensibilidad distinta. La intuición y la subjetividad fue la mejor manera de descubrir el universo de cada artista y cada obra en secuencia.”
«Justamente es la pandemia el disparador del segundo número, el cual tiene como punto de partida las sensaciones de la cuarentena. ¿Cuántas personas seguirán en total encierro hoy en día?»
¿Y por qué solo mujeres? Pregunto, para terminar. “Fue lo más natural que sentí al plantearme el proyecto, no lo imagino de otra forma. En casi todos mis trabajos siempre retrato mujeres porque encuentro mucho misticismo alrededor de la intimidad y la soledad femenina. Si bien Carambola no es una publicación política o que pudiese considerarse activista respecto al feminismo, sabía que como espacio de difusión debía y quería apoyar en la exposición del trabajo de mujeres.”
Puedes leer el primer número del zine online en este enlace y la segunda entrega aquí.