Casi acaba la tarde en Lima y recién empieza en Los Ángeles, California; lugar desde donde se conecta Giancarlo Huapaya, con quien conversaré por Zoom acerca de uno de mis libros favoritos de la vida. Gracias a la magia del Photoshop, Jorge Eduardo Eielson (el autor) también enciende su camarita y se une a esta cita para hablar de ‘Room in Rome’. Soñar es gratis.
‘Habitación en Roma’ de Jorge Eduardo Eielson es un libro precioso. Sus versos me han obsequiado sensaciones brutalmente hermosas en poemas como Albergo del Sole, Foro Romano y Campidoglio. Eielson tiene el poder de desgarrarte sutilmente, con paciencia, capa por capa, hasta llegar al terminal nervioso de las células del cuerpo de su lector.
Creo que ‘Habitación en Roma’ es un buen libro para empezar a leer al poeta e ir avanzando en el embeleso y la mística hasta llegar al artista total que fue Jorge Eduardo. Por eso, cuando me enteré de la existencia de ‘Room in Rome’ y de su nominación a los National Translation Awards en Estados Unidos, sentí gozo y esperanza en la aún más extraña realidad en la que nos ha sumido esta pandemia.
La poesía subsiste, pese a todo y como siempre, desde su origen hasta su paso a la expresión escrita. Mi alegría me animó a escribirle a Giancarlo Huapaya, editor de Cardboard House Press con quien tuve una conversa por zoom en la que hablamos de poesía, traducción, gestión y resistencia.
EL ARTE DE TRASLADAR LAS EMOCIONES
El idioma es un factor complejo y determinante para la dinámica social de sus hablantes. No pensamos en ello cuando usamos las palabras, solo nos expresamos de la manera en que hemos aprendido a pronunciarlas y combinarlas con el fin primero de comunicarnos. Escribir en clave literaria te conduce a pensar en el uso de las palabras, de sus sonidos, de sus conceptos y combinaciones. La interpretación y la subjetividad nos sirven para construir un ‘algo cercano’ a lo que se pensó o sintió.
Desde esta perspectiva es difícil imaginar cómo sonará en inglés un poema como ‘Escultura de palabras para una plaza de Roma’, donde la repetición y el ritmo transmiten algo que ha sido específicamente pensado en español. Todo un reto para su traductor David Shook cuya experiencia abarca traducciones del zapoteco istmeño, el portugués y el español.
«Para mantener lo visual en relación con el espacio en blanco de la página, que es un rasgo esencial en los poemas de Eielson, intentó no utilizar más palabras de las que debía para solucionar sus traducciones»
“David conoce a Eielson gracias a Mario Bellatín —me cuenta Giancarlo— que podría tener alguna complicidad escritural con Eielson, por ese sarcasmo minimalista que tiene Mario y que tiene Jorge Eduardo en sus libros. De alguna forma creo que los trabajos anteriores lo habían preparado para enfrentarse a ‘Habitación en Roma’, que entre sus múltiples elementos incluye la interpelación al lector a través de un peculiar sarcasmo, esto podría ser muy complicado de traducir ¿Cómo trasladas el humor de una lengua a otra? ¿Cómo mantienes el encadenamiento del ritmo con esa aparente simpleza y peculiaridad?”
A Shook le funcionó también la economía del lenguaje, “Para mantener lo visual en relación con el espacio en blanco de la página, que es un rasgo esencial en los poemas de Eielson, intentó no utilizar más palabras de las que debía para solucionar sus traducciones —prosigue el editor— y no tuvo miedo a experimentar en cuanto a lo raro y conseguir la extrañeza de la poética de ‘Habitación en Roma’, creo que le funcionó muy bien.”
‘Room in Rome’ fue finalista del premio del PEN América en marzo de este año. “Lo postulamos y llegamos a la short list. Nos puso muy contentos. El libro también ha tenido muy buena recepción en la prensa especializada, muchas buenas reseñas, menciones en listas, es un libro bastante exitoso. Se ha vendido bastante también”, agrega Huapaya.
«Tomamos el riesgo de publicar lo que no se está publicando, de diversificar el mercado de autores, ofrecer otro tipo de voces y poéticas.»
LA LECTURA MÁS PROFUNDA DE UN TEXTO ES LA TRADUCCIÓN
Esa es una ida de Enrique Winter, escritor y traductor chileno, al que Giancarlo hace mención ya casi al final de nuestra charla. Recordemos que la traducción es un oficio creativo y el traductor es también autor. Esto viene al caso porque conversamos otro poco sobre la labor de Cardboard House Press y la loca aventura de fundar una editorial especializada en traducción y libros arte.
CBHP inicia con la publicación de una antología bilingüe de poetas peruanos el año 2014, la que precisamente abre con Eielson y cierra con Mariela Dreyfus (otra de mis poetas favoritas). “De alguna manera tomamos el riesgo de publicar lo que no se está publicando, de diversificar el mercado de autores, ofrecer otro tipo de voces y poéticas. Ahora, lo que el mercado espera de un poeta latinoamericano es que hable de los problemas de su país y no que aborde otros temas o que vayan más allá. Ahí también se da una especie de discriminación. El autor latinoamericano no se puede desligar de alguna identidad que el mercado le ha puesto encima”.
En Estados Unidos el mercado de traducción está creciendo. Están apareciendo editoriales dedicadas solamente a traducción y las no especializadas también están publicando más traducción. “Creo que ahora la traducción del español al inglés se ha incrementado, durante mucho tiempo quienes se han llevado los primeros puestos han sido el alemán y el francés.»
Sin embargo el mercado aún es pequeño y hay que seguir formando nuevos públicos para la traducción. «A pesar de que las traducciones se han estado diversificando un poco más en los últimos años, se siguen acumulando traducciones de los mismos autores. No necesitamos otra traducción de un Neruda, por ejemplo. Nosotros queremos ir contra la exotización del escritor latinoamericano, ponerlo al mismo nivel y que entre a jugar con las mismas reglas que uno angloparlante. Esto es además una situación política, la búsqueda de igualdad y la democratización del acceso a la literatura de otros lugares. Queremos contribuir a cambiar el canon mundial y con ello, la historia.”