Iquiteño, político y escritor. Fue a raíz de una tarea escolar que descubrió su habilidad para las letras. En su obra toca temas que atañen a la sociedad, como la discriminación, el racismo y el aborto. Para él, la emoción es clave. Para escribir se prepara, entra en trance como dice. Respondió el test de Machucabotones y nos contó sobre su proceso creativo, entre otras cosas.
¿Escribes todos los días o solo cuando tienes ganas?
Escribo cuando tengo ganas y eso sucede cuando siento placer por alguna imagen que haya visto en la calle o por una sensación física que pueda experimentar, como cuando te mueres de sed por el calor, te tomas una bebida helada y sientes un alivio sublime, casi celestial. Eso es la escritura: placer, sensación, emoción, alivio.
¿Para qué escribir en estos tiempos?
En este y todos los tiempos, se escribe para no morir. Para tallar en piedra quiénes fuimos, somos y seremos. Confrontar al destino. Nosotros decidimos cuándo nos vamos, no él.
¿Cuándo a mano y cuándo en el teclado?
Ambos en cualquier momento, el pensamiento no capturado a veces nunca más regresa. Es vital registrar todo lo que observamos, olemos, oímos, etc.
¿Cuál es tu método para escribir?
Me gusta entrar en trance, seguir el instinto, preparar la mente y el cuerpo mediante el estímulo de una buena música suave de fondo, una copa de vino, una lectura previa de algún clásico o una película completamente a solas, sin interrupciones, sin celulares, sin teléfonos, sin redes sociales. Luego de eso, comienza la seducción con el papel, con la tinta o con el word y el teclado. Da lo mismo, la excitación está en los dedos, en las ideas y en el corazón.
¿Qué conservas de tu ‘yo niño’?
La sensibilidad. Como diría Raymond Carver: Si no emociona, no sirve. El texto tiene que aspirar a conectar con la fibra más profunda del ser, en especial, de uno mismo.
¿Qué te gusta de tu ‘yo escritor’?
Que escribe las historias que le salen de las entrañas y los cojones, lo que le venga en gana sin que nada le importe.
«se escribe para no morir. Para tallar en piedra quiénes fuimos, somos y seremos. Confrontar al destino. Nosotros decidimos cuándo nos vamos, no él»
¿Si mañana todo se termina?
Nada se termina, la energía no muere, el universo es infinito, siempre hay una primera vez para todo y todo empieza siempre una vez más.
¿Cómo te das cuenta que un texto ya está listo para ser publicado?
Cuando me gusta, cuando me conmueve, cuando me perturba. Se debe escribir la historia que nos gustaría leer.
¿Cómo le explicarías a un niño de qué trata tu escritura?
Que son textos del futuro, que así será la vida cuando crezca, pero que a pesar de todo, pase lo que pase, él decide qué final ponerle a la historia.