Estaciono. Apago el motor. Trato de salir del auto, pero las piernas me tiemblan. “Necesito un trago” pienso. Alzo la vista y aparece ante mí, como si de una enorme ola se tratase, ese edificio ancho y despintado, de pocos amigos, luces pálidas y almas deambulando. Los fantasmas que asoman por sus ventanas me miran. […]
Me encontraba en un dilema: escribirle o no. Una parte de mí moría por hablarle y decirle lo mucho que lo extrañaba y me hacía falta, mientras que otra parte sabía que humillarme de esa manera no era correcto. Habíamos terminado, sí, pero no por mi culpa. Yo no hice lo que él hizo, ni le di motivos para que dudara de mi confianza. En conclusión, quien la había cagado era él […]